México
México y Estados Unidos acuerdan frenar migración
Ebrard dijo que la mayor preocupación del gobierno mexicano es la frontera norte
Los gobiernos de Estados Unidos y México acordaron fortalecer los mecanismos para frenar la migración irregular en la región, analizaron la necesidad de acelerar la reapertura a las actividades no esenciales en la frontera terrestre común —pero no se acordó una fecha para ello— y se descartó el uso de un pasaporte sanitario entre las dos naciones.
Este martes, de visita en México, el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, se reunió con el canciller Marcelo Ebrard y los secretarios de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez; de Hacienda, Arturo Herrera, y con el fiscal Alejandro Gertz, así como con altos mandos de la Secretaría de la Defensa Nacional, de la Marina, Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración (INM).
Lea también: México acumuló 230 mil 424 muertes por COVID-19
Tras la reunión privada con Mayorkas, Ebrard dijo que la mayor preocupación del gobierno mexicano es la “frontera norte, en virtud de que ya llevan mucho tiempo la restricción a las actividades normales, comunes y corrientes: comercio, viajes, turismo, en fin, que dificulta la actividad económica y la vida de esas comunidades, estamos hablando de ciudades muy grandes, de regiones económicas muy grandes”.
Recordó que se va a acelerar la vacunación, con el propósito de que los promedios de inmunización en México sean muy parecidos a los promedios en las ciudades estadounidense.
“Para ello, vamos a utilizar las vacunas que recibimos hoy temprano [ayer] provenientes de Estados Unidos —más de un millón 300 mil—, que fueron ofrecidas, aportadas, por Estados Unidos, una vez que habló el presidente López Obrador con el presidente Biden sobre el tema de vacunas”.
Dijo que Mayorkas estuvo “muy abierto, muy dispuesto, en muy buena actitud” en este tema y se acordó crear un grupo de trabajo para regular esta situación y acelerar la apertura fronteriza con la aplicación de las vacunas Johnson & Johnson a la población fronteriza mexicana de más de 18 años.
Ebrard indicó que también analizaron con Mayorkas la prioridad de ambos países para el intercambio económico de viajes, porque está muy vinculado con la actividad económica, por lo que se planteó mejorar la infraestructura que tenemos ambos países en la frontera norte, en los aeropuertos.
Respecto a la migración, externó que se planteó atender las causas de fondo de este fenómeno que ha estado siempre presente en nuestros países, “y lo va a seguir estando por muchos años, y ojalá encontremos las mejores vías para poder proteger adecuadamente a las personas que se mueven entre unos países y otros”.
Por separado, también en conferencia de prensa, luego de reunirse con Ebrard y con Gertz, Mayorkas dijo que México y Estados Unidos se presionan y tienen el desafío mutuo para reducir la migración irregular que cruza por ambos países. Aseveró que el gobierno del presidente ha sido claro en su mensaje en el sentido de que la frontera entre México y Estados Unidos no está abierta a la migración irregular.
“Nos hemos desafiado mutuamente con respecto a qué más puede hacer cada uno de nosotros para abordar la migración irregular que ha persistido durante varios meses”, expuso Mayorkas. “No es sólo una cuestión de que Estados Unidos pida a México, es una cuestión de lo que ambos podemos hacer”, dijo al ser cuestionado sobre los acuerdos alcanzados.
En el cónclave en la Cancillería mexicana, Ebrard Casaubon insistió a Mayorkas en la necesidad de la reapertura de la frontera terrestre entre ambas naciones, pero no se estableció una fecha para ello, si bien se acordó avanzar en la vacunación contra el Covid-19 en las ciudades fronterizas mexicanas para avanzar a ese objetivo.
La frontera está cerrada a viajes no esenciales desde el 21 de marzo de 2020 por la pandemia de Covid-19, que ha dejado a Estados Unidos como el país con más muertes, con más de 600 mil, y a México como el cuarto, con alrededor de 230 mil.
Reabrirla es una urgencia para México porque la frontera es una de las más dinámicas del mundo, con más de 3 mil kilómetros, más de un millón de personas que cruzan cada día, y un intercambio diario de bienes y servicios por un valor de mil 700 millones de dólares. Con información de El Universal.