Las fresas lo tienen todo: belleza y propiedades. Se trata de un producto con un bello color y diversos componentes que favorecen a quienes lo consumen.

La fresa en realidad no es un fruto, dice la Fundación Española de la Nutrición, que describe que las fresas son una modificación carnosa del tallo con la función de contener dentro de ella los frutos de la planta, siendo las pepitas, o aquenios, los auténticos frutos.

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Cada fresa alberga entre 150 y 200 aquenios, dice la fundación.

Con sus tantas propiedades, hay diversas razones por las cuales comer fresas, un producto tan sensible, dice la Secretaría de Agricultura, que su recolección debe ser manual.

Son hidratantes

Por principio, vale destacar que las fresas aportan pocas calorías, lo que según la plataforma Mejor con Salud, las convierte en un producto altamente recomendado para perder peso de forma saludable.

“(Las fresas) controlan la sensación de hambre y apoyan las funciones metabólicas”, dice el sitio dedicado a la nutrición.

Añade que las fresas son de las mejores opciones para los deportistas, dado que contienen minerales esenciales que favorecen el equilibrio de los electrolitos del cuerpo.

Tienen abundante vitamina C

Las fresas tienen más vitamina C que los cítricos, de acuerdo con el sitio de la fundación Eroski.

Una persona adulta sana, explica el portal dedicado al consumidor, necesita 80 miligramos de vitamina C cada día, lo cual se puede satisfacer completamente al consumir 100 gramos de fresas.

Añade que la vitamina C tiene además la capacidad de favorecer la absorción del hierro de los alimentos, por lo que mejora o previene la anemia ferropénica y mejora la resistencia a las infecciones.

Aportan fibra

Las fresas destacan por su aporte de fibra, la cual mejora el tránsito intestinal, destaca Consumer, el sitio de la fundación Eroski dedicado a la protección de los consumidores.

Refiere que la fibra atrapa determinados compuestos que como ácidos biliares y colesterol, los cuales son excretados junto con las heces.

“También acelera el tránsito intestinal, reduciendo el tiempo de contacto de algunas de estas sustancias nocivas con el tejido intestinal, lo que previene o mejora el estreñimiento y reduce el riesgo de cáncer de colon”, dice Consumer.

Previenen males graves

Los flavonoides contenidos en las fresas son excelentes aliados para optimizar las funciones cerebrales, porque inhiben el estrés oxidativo, dice el sitio Mejor con Salud.

Los flavonoides, explica la plataforma dedicada a los temas de nutrición, están relacionados con la disminución del riesgo de deterioro cognitivo en los adultos mayores, y podrían ser clave en la prevención de trastornos neurodegenerativos.

Por su lado, un artículo del doctor Mercola, resalta que las mujeres que consumen más de tres porciones de fresas por semana tienen un riesgo 32 por ciento menor de padecer un ataque cardíaco, gracias a los flavonoides antocianincas presentes en las fresas.

Comer fresas puede ayudar a controlar tus niveles de azúcar en la sangre y reducir el riesgo de algunas enfermedades, coincide la plataforma Healthline.

Si te has animado a incluir raciones de fresas en tu dieta, recuerda que éstas deben ser parte de una alimentación balanceada, y también, que debes desinfectarlas bien antes de comerlas. Con información de El Universal.