La administración de Joe Biden se alista para comenzar a ofrecer vacunas contra Covid-19 a los migrantes bajo custodia de Estados Unidos a lo largo de la frontera con México, donde los cruces ilegales están en los niveles más altos en más de dos décadas y los funcionarios de salud están luchando con un número creciente de infecciones, reportó este martes The Washington Post.
Se menciona que una cifra limitada de indocumentados han recibido las dosis, mientras estaban detenidos en los centros del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
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De acuerdo con el reporte, a largo plazo, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) brindará los biológicos, después de que los migrantes crucen a EU y aguarden el proceso por parte de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Las vacunas se darán a los que enfrentan la deportación, así como a los que pueden ser liberados, con vigilancia, en espera de un proceso judicial, dijeron altos funcionarios al The Washington Post.
A quienes sean expulsados bajo la norma sanitaria conocida como Título 42 no se les brindaría la sustancia, al menos en la fase inicial del proyecto, dijo la fuente al medio.
El Post detalló que se les daría la dosis de Johnson & Johnson. Los funcionarios familiarizados con el plan dicen que la campaña de vacunación fronteriza puede ayudar a mitigar la propagación agresiva de la variante Delta en ambos lados de la frontera entre Estados Unidos y México.
“Las tasas a las que los no ciudadanos encontrados dan positivo por Covid-19 han aumentado significativamente en las últimas semanas”, dijo David Shahoulian, subsecretario de política fronteriza e inmigratoria del DHS. “Y aunque la tasa de infección entre los oficiales de la CBP había estado disminuyendo, esta tasa recientemente comenzó a aumentar nuevamente, a pesar de que el porcentaje de oficiales y agentes que han sido completamente vacunados ha aumentado significativamente desde enero”.
“Esto ha llevado a que un número cada vez mayor de personal de CBP sea aislado y hospitalizado”, dijo Shahoulian, cuya declaración advirtió sobre consecuencias potencialmente graves si la administración Biden ya no puede usar el código de salud pública del Título 42 para devolver rápidamente a los migrantes a México.
Los funcionarios de ICE se están preparando para enviar al menos 500 oficiales y personal para ayudar temporalmente a la CBP en los sectores fronterizos donde el hacinamiento es más agudo. El personal médico de ICE coordinará el esfuerzo de la vacuna, según dos funcionarios con conocimiento del plan tentativo, reportó el Post. Con información de El Universal.
