Joe Biden discutió ante el Senado sobre su multimillonaria agenda de gastos. Se trata de dos proyectos de ley: un paquete de infraestructura por 1,9 billones de dólares y una segunda propuesta para ampliar la red de seguridad social.
El proyecto de infraestructura incluye fondos para programas de carreteras que vencen a finales de octubre, lo que impone a los legisladores un plazo para resolver desacuerdos.
De acuerdo a una nota de CNN, los principales demócratas han presionado para que el proyecto de ley bipartidista se apruebe en la Cámara antes de finales de mes.
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Biden había impulsado originalmente un proyecto de ley de gasto social de 3.5 billones de dólares, que contempla la expansión de la educación gratuita, el cuidado infantil y otros puntos de lo que la Casa Blanca llama infraestructura humana.
La nueva serie de reuniones refleja, según The Washington Post, una urgencia política sobre la promesa de reformar las leyes de salud, educación, inmigración, clima e impuestos.
Biden comunicó a los demócratas que se reducirá la financiación propuesta para la asistencia domiciliaria a los ancianos y discapacitados hasta menos de 250.000 millones de dólares.