Los celulares son una excelente herramienta tecnológica que te puede salvar en un momento de emergencia. Sin embargo, con la llegada de la pandemia por Covid-19 su uso se incrementó, principalmente entre los jóvenes. Por ello es importante hacer notar que su utilización debe ser moderada, especialmente por las noches, pues implica algunos riesgos.

Y es que la dependencia al celular para llevar a cabo tareas fundamentales en el trabajo y la escuela ha traído problemas que el cuerpo puede sufrir debido a la exposición a la luz artificial que emanan estos dispositivos, sobre todo cuando es de noche.

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Aunque parezca indefenso, utilizar el celular durante las noches tiene consecuencias que te afectarán a largo plazo, aquí en Tech Bit te presentamos cuáles pueden ser.

En un artículo publicado en la revista Saber Vivir, Diego Redolar, investigador del grupo Cognitive NeuroLab y del instituto Brain 360, apuntó que el 81% de los jóvenes ha modificado su ritmo de sueño a raíz del incremento a la exposición de los teléfonos celulares, más aún en los periodos de confinamiento.

Las personas que usan el celular de noche suelen reducir hasta una hora su ciclo de sueño mientras se deslizan por la pantalla. A este fenómeno se le denomina “Vamping tecnológico”.

Ante esta alteración, el experto considera conveniente establecer rutinas para el uso de los dispositivos móviles y para los periodos de descanso. Y aunque el problema es mayor entre adolescentes, también las personas mayores son vulnerables a sufrir este fenómeno tecnológico.

La razón por la cual es un riesgo utilizar el smartphone en las noches es que la luz que emite la pantalla está diseñada para mantener en alerta al cuerpo durante el día. No obstante, en las noches el sistema nervioso se prepara para entrar en un periodo de descanso y, al encontrarse con esta luminosidad ocurre lo contrario.

Para conciliar el sueño el cuerpo emite melatonina, hormona que transmite la señal para dormir; al interferir la luz de la pantalla, el cerebro disminuye la producción de melatonina y altera el periodo de descanso.

Más allá de no dormir, el problema es que se presentan malestares como irritabilidad, falta de concentración y pérdida de la memoria durante las actividades cotidianas.

Además, las personas que sufren de insomnio también son vulnerables a la exposición de la luz de las pantallas, su ciclo es capaz de alterarse hasta el punto en que deberán acudir con algún profesional para que los auxilie.

En otro artículo publicado por la UNAM, se advierte que exponerse a utilizar el celular en las noches crea malos hábitos. La institución señala que la luz de la pantalla también puede alterar el ritmo cardiaco.

El texto explica que el núcleo supraquiasmático es la estructura cerebral encargada de recibir la información de la luz ambiental, pero cuando se expone a una luz artificial (como la que emiten las pantallas) el organismo se confunde y se altera el “reloj biológico”.

También es importante señalar que cuando una persona duerme, el cuerpo realiza un proceso de metabolismo que también se afecta al no tener un descanso, por lo que, además de traer un trastorno del sueño, te acarreará un problema digestivo.

Y los riesgos no terminan cuando bloqueas la pantalla de tu celular. Es bastante común que las personas que han estado expuestas al estímulo del dispositivo  continúen despiertas hasta el punto de necesitar horas para que puedan cerrar los ojos. En ese tiempo comienzan a dar vueltas en la cama y generan pensamientos que las distraen del descanso.

Ante estos riesgos, los expertos aconsejan varias medidas que te ayudarán a saciar la necesidad de mantener los ojos pegados al celular. Una de ellas es no mirar tanto el reloj, controlar las emociones, alejarse de la luz artificial al menos 30 minutos antes de dormir y establecer horarios para usar los dispositivos.

También hay que decir que algunos celulares ya cuentan con asistencia inteligente (muy útil para personas con debilidad visual)  que te brindará la opción de activar un “modo descanso” o modo nocturno. Ahí podrás poner en silencio tu dispositivo, bloquear notificaciones y fijar el horario en el que necesitas desconectarte de la tecnología.

Utilizar tu celular en las noches acostumbrará a que engañes a tu organismo para que crea que es de día, así que la próxima vez que te llegue un mensaje a altas horas de la madrugada, quizá quieras reconsiderar dejarlo de lado y darle a tu cuerpo un buen descanso. Con información de El Universal.