El presidente Joe Biden anunció este jueves nuevas medidas para dificultar el acceso a armas de fuego por parte de criminales, al tiempo que garantizó los recursos suficientes para la policía.

En medio de un repunte generalizado de la violencia en varias ciudades del país, el mandatario se refirió al aumento de homicidios y dio su apoyo a las fuerzas de seguridad, después del reciente asesinato de dos agentes en un tiroteo registrado en el barrio de Harlem, Nueva York.

“La respuesta no es quitar fondos a la policía”, subrayó Biden, reiterando su oposición a ese reclamo que se hizo popular durante las protestas contra la violencia policial de los últimos años.

En un discurso en la sede del Departamento de Policía de Nueva York, el presidente insistió en que quiere dar a los agentes “las herramientas, el entrenamiento y la financiación” que necesitan para proteger a sus comunidades.

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Por ese motivo destinará 500 millones de dólares en refuerzo policial en las ciudades y en iniciativas como fomentar las actividades extraescolares para tener ocupada a la adolescencia, así como crear oportunidades económicas en los barrios más deprimidos. Sin embargo, estos fondos deben ser aprobados por el Congreso.