Con todo el crecimiento en el centro de Texas, uno de nuestros desafíos es el envejecimiento de la infraestructura, que incluye represas. Los Defensores encontraron que hay 18 represas reguladas por el estado en el centro de Texas que el estado considera que están en “malas condiciones” con problemas de seguridad y estructurales.

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La Comisión de Calidad Ambiental de Texas (TCEQ) dijo que la definición de una represa pobre es:

“Se observaron deficiencias mayores de mantenimiento, estructurales y/o hidráulicas al momento de la inspección que podrían amenazar la integridad de la presa, o la presa no pudo ser inspeccionada debido a las deficiencias. El propietario debe tomar medidas inmediatas para abordar todos los elementos”.