Texas no ha tenido un hospital cerrado desde 2020, un alivio muy necesario después de la década anterior de cierres que se observaron predominantemente en las comunidades rurales.

Eso podría cambiar pronto: un nuevo informe de Kaufman Hall, una agencia de consultoría de atención médica, que se hizo público el miércoles muestra que casi 1 de cada 10 hospitales de Texas ahora está en riesgo de cierre, el doble que antes de que comenzara la pandemia de coronavirus en 2020.

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“En última instancia, nuestra preocupación es que esto afectará la atención del paciente”, dijo John Hawkins, presidente de la Asociación de Hospitales de Texas.

El informe destaca el impresionante número de víctimas de la pandemia en los hospitales del estado, ya que se enfrentan a una tensión cada vez mayor debido a los aumentos repentinos de enfermedades respiratorias, la escasez de mano de obra y el aumento de los costos de medicamentos, suministros médicos y mano de obra.