La Policía estadounidense confirmó este domingo que el cuerpo sin vida hallado en el interior de la furgoneta acorralada por las fuerzas del orden es la del presunto autor del tiroteo que este sábado mató a diez personas e hirió a otras diez en Monterey Park, cerca de Los Ángeles.

El vehículo coincidía con las declaraciones de algunos testigos y cuando los agentes se acercaron para contactar con el ocupante, oyeron un disparo procedente del interior. El conductor se había disparado a sí mismo, según dijo en conferencia de prensa el comisario del condado de Los Ángeles, Robert Luna.

El tiroteo se produjo sobre la hora local del sábado en una sala de baile de Monterey Park, a unos 13 kilómetros al este de Los Ángeles, tras un festejo de celebración del Año Nuevo chino.

En Monterey Park, donde según datos oficiales un 65,5 % de los residentes son de origen asiático, se habían reunido horas antes miles de personas para celebrar el Año Nuevo chino. El festival estaba previsto que continuara hoy, pero ha sido suspendido.