Dos padres de Texas fueron arrestados y acusados de tatuar a sus hijos a la fuerza, luego intentaron quitar los tatuajes una vez que los Servicios de Protección Infantil (CPS) se involucraron, según el teniente James Denby del Departamento de Policía de Zavalla.
Denby dijo que el 17 de abril, CPS notificó a la policía sobre padres que tatuaban a sus hijos y pidió que los funcionarios del condado de Angelina estuvieran presentes cuando fueran a la residencia donde se estaba cometiendo el crimen. Durante la visita del día siguiente, 18 de abril, dos niños de 5 y 9 años fueron puestos bajo la custodia de CPS.
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Durante la investigación, Denby dijo que el padrastro de los niños, Gunner Farr, y la madre, Megan Farr, estaban “sujetando a la fuerza” a los niños para hacerles los tatuajes caseros. Después de que hubo más información disponible, Denby dijo que había lesiones visibles en los niños que mostraban que los padres intentaron quitarse los tatuajes una vez que descubrieron que CPS estaba a punto de involucrarse.