n medio de una crisis migratoria que afronta Estados Unidos, cada vez son más los estados que aplican nuevas medidas al respecto. Este es el caso de Texas y Arizona, dos jurisdicciones en los que las deportaciones aumentaron considerablemente en el último tiempo. Justamente, se trata de dos de los destinos más elegidos por los extranjeros que ingresar al territorio estadounidense de manera ilegal, debido a su frontera sur con México. En específico, las deportaciones de personas que cruzan la frontera sin permiso se duplicaron en la última semana.

A comienzos del mes de junio, Biden firmó una orden ejecutiva mediante la cual restringió la cantidad de solicitudes de asilo que se pueden realizar por día, lo que impactó directamente en la marea de migrantes que llegaban a diario a los límites de la nación norteamericana

A la gran cantidad de inmigrantes presentes en Texas y Arizona, se les suman las fuertes políticas migratorias impulsadas por ambos gobiernos locales. Sin ir más lejos, el gobernador Greg Abbott lidera la Operación Estrella Solitaria, que justamente combate la llegada ilegal de extranjeros. También continúa en busca de la aprobación de la polémica ley SB4, que habilita a policías a arrestar a inmigrantes sospechosos de haber cruzado la frontera de manera ilegal.

Por su parte, el Congreso de Arizona determinó una propuesta que preguntará a los habitantes del estado fronterizo si la policía local debe o no detener inmigrantes que crucen desde México. La interrogante estará en la boleta de los comicios del 5 de noviembre.

Con información de Voz de América.