El expresidente estadounidense Donald Trump cree que está vivo de milagro tras el atentado sufrido en un mitín el pasado sábado y agregó que “debería estar muerto”, en su primera entrevista tras el ataque con el diario The New York Post.
“El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo llamó un milagro”, explicó el expresidente, con parte de su cabeza aún vendada por las heridas recibidas tras el atentado y en declaraciones exclusivas al diario neoyorquino.
Un Donald Trump que se mostraba “agradecido y a veces desafiante”, según el rotativo, dijo que “se supone que debería estar muerto”, al recordar el momento en el que su atacante le disparó en el mitin de la campaña republicana.
Con información de EFE