La Policía de Round Rock continúa investigando la mortal balacera del Festival de Juneteenth de Round Rock del 15 de junio, arrestando hasta ahora a dos jóvenes.

Sin embargo, la edad de los implicados afecta los datos que se pueden divulgar, uno es menor, lo que significa que el proceso se realizaría a puerta cerrada.

Ricky Thompson, lll, permanece en la cárcel del Condado Williamson bajo cargos de agresión con arma mortal en relación con el caso y por virtud de cumplir los 17 años dos semanas antes del crimen, enfrentará proceso como adulto. Su defensa dijo estar preparada para tal posibilidad.

“Creo que hasta que averigüemos quién estuvo involucrado, quién hizo qué, es muy prematuro comenzar a asignar culpas, incluso a clasificarlas y mucho menos a responsabilizar a las personas”, dijo Amber Vásquez, abogada de Thompson.

Pero el segundo implicado, detenido el viernes, enfrenta otra situación por ser menor de edad.

“En Texas, cualquier niño entre 10 y hasta los 17 años se considera menor de edad. Cuando cumplen 17, se convierten en adultos para efectos de los cargos y tratamiento de sistema penal”, dijo Ellen Marrus, quien dirige el Centro de Derecho y Política Infantil de la Universidad de Houston.

La especialista destacó la importancia de la confidencialidad cuando se trata de menores: “cuando se creó el tribunal de menores, la idea era que los niños son diferentes, necesitan ser tratados de manera diferente y no deberían tener el estigma de ser un criminal”.

En Texas, cualquier niño que vaya a ser transferido a una corte criminal debe pasar por una audiencia judicial: “basada en varios factores, la historia previa del niño, si ha tenido algún historial en el sistema juvenil, si sienten que no podrían ser rehabilitado”, detalló Marrus.

Con información de Telemundo.