El miércoles, las cuadrillas del municipio de Austin recorrieron el área metropolitana para despejar el sistema de alcantarillado, especialmente las entradas y salidas del desagüe y los esteros y canales. El trabajo se realizó en preparación para el potencial de lluvias torrenciales el jueves y viernes.

Habitantes de Austin han limpiado los drenajes por todas las calles. Algunos han utilizado limpiadora a presión para disolver los escombros que una aspiradora luego absorbía en las rendijas del alcantarillado.

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Kirk Killingsworth opinó que: “Sin no uso una limpiadora a presión, las alcantarillas se tapa de nuevo y el agua vuelve a salir a la calle, así que no tenemos un flujo apropiado del agua lluvia”.

Este proceso ha sido eficaz en evitar inundaciones, pero esta vez el potencial de anegamiento y obstrucción del sistema de desagüe es mayor debido a la caída de ramas y escombros que dejó la tormenta de hielo de febrero pasado: “las personas dejaron los árboles y escombros en un costado de la calle en la vía pública, así que las hojas cayeron en las entradas y tenemos que volver y despejarlas”.